No hay sufrimiento mayor que mirar al mundo y a uno mismo para observar el verdadero potencial del ser desperdiciado por la brutalidad del temor… esa fuerza tan real y potente que en ciertas ocasiones se puede sentir rozar la piel e inundar de desesperación y oscuridad por mandato de la sombra…
El camino de los sueños muchas veces es el camino del loco… siempre habrá quien trate de disuadirnos… no por maldad, ni mezquindad, sino con un arma de increíble poder... el amor, el afecto, la estima, y la empatía… pues aquellos que nos quieren de corazón se preocuparan por nuestro trayecto… esperaran que no involucre demasiado sufrimiento, dolor y castigo… pero si nuestro sueño es de corazón debemos avanzar pase lo que pase, ya que ahí se encuentra nuestra felicidad… y aquellos que les importamos terminarán por comprenderlo…
Cuando acallamos a nuestros sueños… cuando evitamos escuchar el susurro del ángel… cuando cerramos los ojos del resplandor del corazón… toda esa energía, toda esa fuerza que podría ser utilizada para crear mundos nuevos y milagros que causarían ecos en el interior de nuestros semejantes terminara por destruir y corromper al sujeto encarnado y ese dolor irá aún más lejos afectando y alimentando a la sombra del colectivo… todos estamos unidos… creemos y no dividamos…
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