-La humanidad no ha poseído pocos seres, que durante la historia del mundo, se han destacados sobre los demás –dijo una voz en susurro-, pero generalmente son pocos en su entorno de desarrollo y desenvoltura.
-Hay dos tipos de grande entre los grandes –expresó una sombra con un tono normal-, el primero, de más fácil surgir, es “el genio”, un ser nacido con enormes habilidades, las cuales le proporcionan la facultad de lograr sin mayores dificultades, lo que no es sencillo para los supuestos iguales e incluso puede alcanzar metas aparentemente imposibles.
-El segundo, de difícil camino, es “el sabio” –complementó una sombra que apreció detrás del joven-, éste no tiene características sobresalientes e incluso puede en un comienzo haber sido menos que sus equivalentes, pero mediante determinación, esfuerzo y constancia, logra mejorar poco a poco hasta llegar a límites insospechados, alcanza e incluso en ocasiones supera al primero.
-El genio es uno entre pocos y no tiene demasiadas dificultades con obtener la grandeza -dijo una sombra que se le aproximaba-, pues sólo debe trabajar tan duro como el resto, incluso menos, para resaltar. Logrará puestos elevados y no es difícil que se transforme en líder, ya que muchos de estos llevan el carisma dentro de sí.
-El enorme problema que muchos de estos individuos enfrentan –tomó la palabra una voz más alejada-, es la falta de dirección, de motivación, lo que los lleva a terminar desaprovechando sus talentos después de un tiempo en vida. Ese es el motivo por el cual no es tan difícil ver caer a quienes han sido imponentes. Muchos nunca supieron el esfuerzo que representa obtener fuerza y poder, y nunca lo valoraron… el error y el fracaso pueden ser los mayores maestros, pues al aprender de ellos comprenderás la equivocación y podrás prever un futuro tropiezo…
-Los sabios son distintos a los genios –dijo otra voz que aparecía detrás suyo, pero más a la lejanía-, nunca les ha resultado nada fácil, han tenido que luchar por ser alguien y todos ellos han caído una y otra vez, pues la vida no les ha tenido misericordia, ya que ésta los necesita para crear maestros para la existencia… inspiración para aquel que se atreva a soñar.
-En ciertas ocasiones aquellos nacidos con el talento se deciden a buscar, –agregó una de las primeras voces que le habló al muchacho-, esa luz capaz de iluminar cada esencia, si éstos se atreven a desearla con una voluntad real y, sólo si nunca desisten, alcanzarán una cima sin límites, una magnificencia suprema más allá del genio o del sabio…
No hay comentarios:
Publicar un comentario